Entrrrrrrrre dos tierrrrrrras

Es curiosa la velocidad de la mente y las conexiones que ésta traza. Ayer canturreaba una canción de Urrutia que me saltó inesperadamente en el ordenador, cuando recordé (no sé muy bien por qué) otra que versiona con Ariel Rot, "Qué barbaridad" (en la que éste se marca una guitarrita que mola mucho). Busqué en youtube y no la encontré. Pero encontré ésta que canta con Bunbury, y ahi me quedé enganchá. Quizá porque me hizo gracia ver al bunbury tan suelto. Ja, no es que le haya visto mucho (no es santo de mi devoción) pero me vino a la cabeza un recuerdo de cuando su canción "Entre dos tierras" era famosa mas allá de nuestras fronteras, y tuve la impactante ocasión de ver en una disco a decenas (sino cientos) de alemanes cantando a voz en grito el estribillo de esta canción mas o menos como un pronunciadísimo "entrrrrrrrre dosss tierrrrrrrrrrrrrrrrrras", cosa que a pesar de dar mucho miedo, por otra parte te hacia frotarte los ojos y sonreir por aquella especie de guiño del destino que me hacia escuchar (aunque fuera a voz en grito y con esa vibración de "r" tan intensa) unas palabras en mi idioma, mas allá del que nosotros mismos hablábamos. Y mi mente salta de esa rigidez a todo lo contrario, al "bares que lugares" que nos latiniza, que nos desata o desnuda de cualquier atadura mental, nos mediterranea y nos permite disfrutar segundo a segundo de cada pizca de sal marina en nuestra piel, de cada amanecer compartido, de cada bocanada de aire con olor a pinos y naturaleza que caminamos o de cada abrazo arropados por el agua, que si aspiro fuerte y me concentro soy capaz de respirar en toda su intensidad. Si, ya sé que esta entrada es un poco rara y dispersa, pero ya dije que es curiosa la velocidad de la mente. Y la mia centrifuga ;-)