3 de enero de 2009

Menudo fragmento!

"El amor de mi hombre

no conocerá el miedo a la entrega,

ni temerá descubrirse ante la magia del enamoramiento

en una plaza llena de multitudes.

Podrá gritar -te quiero-

o hacer rótulos en lo alto de los edificios

proclamando su derecho a sentir
el más hermoso y humano de los sentimientos".

[(Fragmento de "Reglas del juego para hombres que quieran a amar a mujeres". Gioconda Belli. De la costilla de Eva (1986)]


Siempre me ha encantado este poema, entero, de cabo a rabo. Aunque a veces, especialmente me gusta este fragmento. Tal vez porque casi nunca he tenido la suerte de encontrar alguno de estos hombres que apueste claramente por mi, o que se atreva a reconocer lo que siente, o a decirlo (no sé, tal vez es que realmente no lo sientan, puede que sea así de sencillo). Quizá por eso un mensaje en el vaho del espejo, un "me encantas", un "guapa" o un "te adoro" robados a un momento de inspiración o pasión en el tiempo y el espacio son lo más a lo que puedo aspirar (al menos es mucho mejor que el consabido "si eres una tia alucinante, pero..."). Y me encantan :-) Porque sé que significan un resquebraje en el hielo (ese del control emocional tan aprendido), y notar ese sonido de quebrarse me estremece. Y por eso me gustaria y me fascinaría tanto ese plantarse en medio de una plaza a gritar "que se entere todo el mundo!!!". Tal vez porque yo lo haría. Porque estoy harta del control. Porque siento que de tanto aguantarme, si tuviera la oportunidad me encantaria subirme a una montaña y gritar un "te adoro" que moviera las piedras provocando un derrumbe :-) jaja. Y si pilla a alguien debajo, que le den!