Orilla del mar. Nada más en el universo, exceptuando el nuestro propio. Silencio. Miradas, caricias y el tiempo sin importarnos. Si le escribiera a Alejandro Sanz (creo) sobre la idea del paraiso, sería lo mas parecido a esto seguro.
EL CORO DE VÍRGENES URBANAS
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*En un garaje*
*de un barrio alejado*
*cada noche ensaya*
*un coro de vírgenes urbanas.*
*Su canto se eleva*
*y se escapa por los respiraderos*
*y sale a la ...