22 de febrero de 2011

Tus disculpas...

Aun sigo sorprendida por tu mensaje. En realidad aun sigo sin saber que pensar. Recuerdo cómo durante unos segundos no me atrevía ni a abrirlo. Quízá porque pensé que no iba dirigido a mi ["¿¿disculpas??, ¿tú, a mi?"]. No porque no las mereciera (que si, hasta tú te diste cuenta) sino porque si lo abria y veia que en realidad era un error, iba a ser una decepción, una más. Demasiadas. Creo que es la primera vez en todo el tiempo (tanto) que nos conocemos que te disculpas por algo ante mi. Y no sé qué pensar. Supongo que en otro momento me hubiera sentido muy feliz y satisfecha, hubiera pensado algo asi como "por fin!" y hubiera pensado en todo lo bueno, en empezar de nuevo.. no se. Ahora pienso que en realidad no es muy sano estar en una historia en la que el perdón se convierte en algo tan excepcional... Ahora pienso que no sé cómo he podido permanecer ahi sin esperarlas, acomodada en la idea de que tú nunca las pedirias por nada. Hubiera preferido no tenerlas porque no hubieran hecho falta.. y ahora me doy cuenta de que sí que hacian falta y ademas no las tenia. Me recuerda a cuando algunas personas me dicen -referiendose a años antes- el dia exacto en que su pareja las dijo que las queria... Siempre he pensado que si una es capaz de acordarse del dia y momento exacto en que el otro le dijo "te quiero" es porque se lo dice muy poco. Y eso me parece muy triste... Esas relaciones no son excepcionales, son una mierda. [Me quedo con aquellas en las que olvido eso porque he perdido la cuenta]. Tus disculpas me recuerdan tristemente esto... Tal vez, han llegado demasiado tarde. O en su momento justo, quien sabe. El justo para decir "esta bien, pero sigue tu camino"...