17 de febrero de 2010

Garfio y el cocodrilo

Me siento como el Capitan Garfio escuchando el tic-tac en el estómago del cocodrilo que lo merodea. Casi que llega a dar igual hacia que lado caigan las decisiones, pero que caigan ya. Mientras, ese sonar de cada segundo me despista de vez en cuando de mi vida ...

2 comentarios:

rombo dijo...

Sigues con el tic tac... Definitivamente necesitas un reloj, pero un reloj silencioso..

glaukilla dijo...

Hummmm, si. O mucho mas sencillo, que se resuelvan las incognitas que hacen que ese tic-tac me recuerde el momento que han de llegar las respuestas. Si dependieran de mi el reloj ya estaría en silencio pero como depende de otras personas... a esperar. Tic- tac, tic-tac