Al calor del ambiente (asfixiante, hace que hasta me duela la cabeza) se le suma el calor del deseo acumulado. Deseo al que te invito...
¡Qué dirías si hoy te invitara a mis sueños?
Tus labios de manzana
sobre la piel golosa de mis ingles
toda la noche -di, ¿qué pensarías?-,
tu saliva frutal levemente aromando
el hambriento contorno de mi vientre...
Qué cosecha tan dulce
(semillas y caricias y extravíos)
para un mundo sin sol.
Dime, ¿no acudirías
si también esta noche te convoco a mis sueños?
Sé que probablemente acudas (bien!). Asi pues, te convoco. Y preparo mis brazos para rodearte en mi abrazo de bienvenida :) Y mis labios para un beso...
Poema: Josefa Parra "De los sueños" en Alcoba del agua (2002)
JUSTINIANO 321
-
*Lunes Santo.*
*Para conmemorar*
*la unción de los pies*
*de Jesucristo*
*en casa de Lázaro*
*Justiniano de un salto*
*coloca sus pies*
*en la mesa*
*de una ...
2 comentarios:
Bonita y magnética historia.
Me parece una invitación maravillosa y más aún si tienes la certeza de que la otra persona acudirá. El poema increíble, me encanta!
Publicar un comentario