23 de febrero de 2010

Lampara de sal

LLueve tanto y hace tanta humedad que hasta mi lampara de sal, aquella que me regalaste hace años, se ha empezado a resquebrajar y deshacer en pedazos y pedacitos. Menos mal que es sólo la lampara lo que se resquebraja y no todo lo que hemos vivido o soñado bajo su luz. Y que has prometido reponerla cuando vuelvas, jaja.

5 comentarios:

rombo dijo...

Pero por favor !!!! ¿Esta inspiración? Dame la receta. Yo creo que es la sal.

(y no corras tanto, que no me da tiempo a digerirlo todo,jajajaj)

glaukilla dijo...

hummmm, pues en este caso me he limitado a hacer un relato literal de lo que sucede (adjunto foto para que veas) -lamento desilusionarte si identificabas la lampara de sal con alguna metáfora o algo así mas elaborado-

Si te parece que corro, imagina a qué velocidad funciona mi cabeza, jaja, que en realidad sólo escribo uno por dia controlando mis impulsos ;-)

rombo dijo...

Oye, ahora que veo la foto. Yo tengo una igual, y a veces, enciendo una vela y a oscuras, la sujeto entre mis manos para absorber toda su energía milenaria.
Y funciona.

glaukilla dijo...

Realmente es un portavelas :-) Y es magnífica. No sólo absorbe humedad, sino que desprende calor, energias cálidas... Ademas la tengo asociada a un recuerdo tan bonito cuando me la regalaron que siempre la tengo ligada a cosas bonitas. Asi que siempre que la enciendo funciona su buen rollo.

rayajo dijo...

Joder! yo quiero una!